Hola todos y todas soy Christian
Hoy es un día especial, ya vienen las Navidades y voy a pasar las fiestas con mis padres y mi hermana en casa en Hondón; (aunque sé que a tod@s las personas no le gustan los navidades para mí sí son especiales).
He estado pensando cuánto valoro a mi familia y porqué. No es solo por que sean simplemente mi familia, además estoy a gusto y contento con formar parte de ella.
Durante todos los veinticuatro años con enfermedad mental, mi familia siempre ha estado ahí apoyándome. En los primeros años de mi enfermedad yo no me daba cuenta de que ellos estaban ahí y que querían ayudar, yo estaba en una especie de estado de autismo y sólo percibía soledad y oscuridad. No sabía quien era yo.
Durante varios años recuperándome fui reconociendo que mis padres me apoyaban en los malos y los buenos momentos de la vida (controlaban que me tomara la medicación, me acompañaban al psiquiatra...) y el único deseo que ellos tenían era que yo pudiera ser una persona feliz. Esto para mí es algo que valoro muchísimo, y siempre lo voy a reconocer y recordar.
Realmente, la familia es muy importante para tod@s son como un pilar en nuestra vida, son como una especie de roca que está dentro de nosotros, los padres conocen a sus hij@/s mejor que nadie. (A la gente que no tienen familia, o no se lleva bien con ellos, lo siento mucho, de verdad)
Ahora sé que mis padres están muy orgullosos de mí por todo lo que hecho en la vida y esto es una de las motivaciones para seguir adelante, luchar, y continuar haciendo el bien.
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