En esta ocasión me gustaría plantearos que efectos psicológicos puede tener el uso de las redes sociales en mí como persona que padezco una enfermedad mental.
Las redes sociales como Facebook o Twitter tienen efectos psicológicos positivos y negativos en las personas. Ello es porque dependiendo de cómo me encuentre lo reflejo en las redes. Hoy en día son pocas las personas que no tienen un perfil en alguna red social, de hecho, yo tengo uno en Facebook, pero el uso que se le da a las redes es diferente de unas personas a otras puesto que depende de motivaciones distintas. Yo utilizo las redes sociales tanto con una finalidad profesional, pues muestro el trabajo que hago, y también como una diversión, por lo tanto, el tipo de publicaciones es distinto.
Las redes sociales han cambiado la forma en la que nos comunicamos y nos relacionamos con otras personas. Yo utilizo las redes sociales para mantener amistades, buscar amigos de la infancia y ampliar mi círculo social. La comunicación resulta mucho más sencilla y rápida y, además, las redes sociales tienen un alcance global por lo que puedo hablar y relacionarme con personas de todo el mundo. Una de ellas es una prima mía que tengo en Argentina. Esta situación supone también una desventaja porque algunas personas se aíslan al utilizar las redes sociales y se alejan de la vida real, hecho que me ocurrió a mí en la pandemia.
Las redes sociales tienen muchos beneficios para las personas, pero también pueden suponer un riesgo si no se utilizan de forma controlada. Algunos de los riesgos psicológicos son los siguientes:
• Aislamiento. Cuando estábamos en el confinamiento, yo me aislé en mi habitación y no salía de ella sólo para comer pues me relacionaba sólo a través de las redes sociales con mi chico, pues precisamente en aquella época comenzó nuestra relación.
• Adicción a las redes sociales. Muchas personas, sobre todo adolescentes, no pueden estar más de un minuto sin consultar las redes sociales y sienten ansiedad cuando no tienen acceso a ellas. Ello me ocurrió a mí en la época de la pandemia.
• Comportamiento antisocial. El hecho de relacionarnos solo en un entorno virtual con otras personas puede producir un comportamiento antisocial. Ese fue mi caso en el confinamiento.
• La desconexión de las redes sociales puede producir en personas adictas síntomas de ansiedad y de estrés. Si yo en la pandemia no me hubiera podido comunicar a través de dichas redes no hubiera comenzado mi relación con mi chico, pues no hubiéramos tenido forma de comunicarnos. En este sentido estoy hablando del WhatsApp y del Facebook.
Por lo tanto, considero que es preciso realizar un uso responsable de las redes sociales, aprovechar los aspectos positivos que tienen y controlar los negativos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario